Menta, propiedades medicinales y otros usos a lo largo de la historia
Los médicos de antaño afirmaban no sin razón que el aroma de la menta "aclara el cerebro"; por eso, a quienes esperaban tareas intelectuales les recomendaban ponerse en la cabeza una corona de ramas de menta fresca. También se aplicaba en la frente para calmar el dolor de cabeza.
En la actualidad se ha descubierto que el mentol (componente principal de la esencia de menta) dilata los vasos del cerebro y el corazón, pero apenas entra en contacto con la piel o la lengua, estas pierden la sensibilidad. Gracias a las propiedades de la menta, hoy en día contamos con diversos remedios que la utilizan de base: antiespasmódicos, calmantes para el corazón, contra los resfríos, etc. En caso de jaqueca o neuralgia frotamos con un lápiz mentolado las sienes, tomamos gotas tranquilizantes que contienen mentol. Este es uno de los componentes de los bálsamos asiáticos y de las medicinas contra la estenocardia.
Los curanderos rusos conocían desde antaño las valiosas propiedades de la menta, con la cual preparaban principalmente tisanas, que aconsejaban tomar tibias en caso de resfríos y malestares estomacales. Esta infusión curativa servía para hacer gárgaras (en caso de inflamación de la garganta) o para calentar los pies, si se agudizaba el reumatismo.
Si deseas preparar una infusión de esta planta pon 1-2 cucharadas de menta triturada en un frasco y viértele 200g de agua hirviendo. Cierra el frasco herméticamente, colócalo en una olla con agua caliente y déjalo hervir durante 15 minutos. Quítalo del fuego y déjalo reposar en baño María por espacio de 45 minutos. Luego cuela la infusión. Tómala tibia durante el día en porciones iguales.
Hablando de la menta, propiedades medicinales y aromas, en la antigua Rusia, las propiedades de la menta eran muy bien aprovechadas, las hojas y flores de la menta se agregaban al té, otorgándole un rico aroma y sabor. Es probable que de esa manera la gente se protegía de algunas enfermedades y del insomnio. Como es sabido, el té de menta aumenta las energías, tranquiliza los nervios, es un medio efectivo para combatir los trastornos nerviosos, la hipocondría y la histeria.
Hoy es aconsejable seguir la tradición de nuestros antepasados, quienes también aprovechaban las propiedades de la menta para relajar y conservar la paz mental: antes del baño (común o de vapor) ablandaban en esa agua ramitas de menta.
Además, los usos de la menta en nuestras cocinas son universales: constituye un excelente aderezo para las ensaladas, quesos, sopas, pescado, diferentes platos vegetarianos y carne. La menta mejora el apetito y la digestión.
El aceite de menta se mezcla en la masa de los caramelos y golosinas. Por último, si deseas que la leche se mantenga fresca durante largo tiempo, sigue el consejo de las antiguas amas de casa: agréguale unas hojas de menta.
Los usos de la menta son muy amplios: el extracto aromático de la menta mejora el sabor de las mixturas; en perfumería forma parte de los elixires, aerosoles, dentífricos, no solo como elemento refrescante sino también como desinfectante.
Bien, como ya leímos, los usos de la menta son muy variados y sumamente refrescantes. ¡Espero les haya gustado la información y no se abstengan de consumir menta con sus comidas!
¿Usas la menta en tu cocina?
Ahora que ya sabes sobre las propiedades medicinales de la menta supongo que tratarás de incluirla en tus platos. Al hablar de cocina estamos hablando también de sabores y olores y de los gustos culinarios de los demás miembros de tu familia o invitados. No estaría mal que más gente supiera sobre las bondades de la menta gracias a lo que hoy has aprendido en este artículo.