Investigadores estadounidenses han descubierto que el consumo regular de jugo de remolacha roja mejora el flujo sanguíneo en los vasos del cerebro, lo que significa mayor entrada de oxígeno en la materia gris. Los autores de la investigación sugieren que mejorar el suministro de oxígeno al cerebro retarda el envejecimiento y el desarrollo de la demencia senil.
Estas maravillosas propiedades de la remolacha provienen de los nitratos que contiene (los cuales también son abundantes en otros vegetales generalmente rojos). Nuestro cuerpo convierte los nitratos en nitritos y estos ayudan a dilatar las arterias mejorando de esta manera la circulación sanguínea. Otro de los factores importantes relacionados con los nitritos es que según los estudios, estos parecen dirigirse directamente donde se necesita un mayor suministro de oxígeno, aumentando la circulación de la sangre especialmente en estas arterias.
Un equipo de investigadores de la "Wake Forest University", que fue dirigido por el profesor Daniel Kim-Shapiro, invitó a participar en el experimento a 14 personas de ambos sexos de 70 años y más, en el año 2010.
Durante el experimento, a los sujetos se les midió la cantidad de nitritos en la sangre antes y después del consumo de 450 gramos de jugo de remolacha fresca. Una hora más tarde, después de consumir el jugo, a los participantes del experimento se les practicó resonancia magnética para medir la velocidad y volumen de flujo sanguíneo en el cerebro.
Los resultados mostraron claramente que después de beber el jugo, en los sujetos mejoró significativamente el flujo de sangre en la materia blanca del cerebro, especialmente en el lóbulo frontal (área del cerebro asociada con el desarrollo de la demencia senil).
Ahora que conocemos la relación entre la remolacha y la salud cerebral no deberíamos obviar el consejo de tomar jugo de remolacha más frecuentemente.